Ángel de la guarda.
Cuando murió, apareció un ángel con sus maravillosas alas desplegadas, un tamaño superior al común de los humanos y una belleza andrógina indescriptible. Yo, más que asustado estaba maravillado ante inigualable presencia. Tomó con sutil cuidado el cuerpo de mi amada y en forma espiral lentamente ascendió al cielo.
Al cabo de un tiempo, me encontré en un bar cerca de la casa a un hombre que me causo una impresión extraña y quizás conocida. Él se me acercó y dijo que era el ángel que se llevó a mi esposa. Casi caí del asiento cuando lo dijo, y aún más al verlo vestido como hombre normal y sin sus alas. Dónde la escondería me pregunté en mi mente.
-Y cómo está ella pregunté ?
-Bien ! -Me contestó.
-Por qué estás aquí ? le insistí.
-Bajé porqué te vas conmigo.
-Me puse nervioso, y me mantuve en silencio unos minutos. Luego de par de tragos rápidos, comprendí que había llegado mi hora.
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